Azafata

Mi primer contacto con el mundo profesional fue a través empresas de organización de eventos, una experiencia profesional que compaginaba con mis estudios.

Con el trabajo de azafata en ferias, congresos y diferentes eventos aprendí protocolo, pude poner en práctica mis conocimientos de inglés, y observar la importancia de la comunicación, ámbito al que posteriormente me he dedicado de manera profesional.

Al promocionar todo tipo de productos, desde alimentación hasta electrodomésticos, descubrí la importancia de ser versátil y tener una gran capacidad de adaptación, pues en muy poco tiempo debía conocer bien un producto para poderlo descubrir a los clientes.

Un experiencia que me hizo trabajar con responsabilidad y tener siempre en cuenta las necesidades de los clientes.